domingo, 3 de abril de 2011

Gandhi homosexual

Una reciente biografía de Gandhi revela que era homosexual. Por suerte en nuestros días se han superado los viejos prejuicios. Aunque en la India el libro ha sido censurado estupidamente.
Pero no deja de ser preocupante que el mas grande representante del pacifismo y la no violencia no fuera heterosexual como la mayoría de la población del sexo masculino. Porque enseguida surge la sospecha de que el pacifismo es una rareza, ajena la hombre común. Y aunque muchos heterosexuales han adoptado el pensamiento pacifista, mucho nos tememos que solo sea una pose de conveniencia. La mala bestia humana sigue latente por dentro. Ejemplo, nuestro insigne presidente, pacifista de ocasión.
¿No hay esperanza para una humanidad no violenta? Me temo que no.
Gandhi se inspiro para su filosofía pacifista en Bertrand Rusell, este si heterosexual. Pero Rusell tampoco era un hombre corriente, sino un sabio. Seguramente con un coeficiente de inteligencia muy elevado. No era una persona común y por lo tanto tampoco representativo de la humanidad macha.
El pacifismo no es lo normal en el hombre, aunque si en las mujeres que encima sufren la violencia de sus congeres machos.
La marca de Caín es imborrable, solo si todos nos hicieramos gays o sabios tendríamos una posibilidad de éxito, de evitar la autodestrucción de la humanidad. Pero eso bastante improbable, pese al esfuerzo de metrosexualizarnos y culturizarnos.
Es de notar la paradoja que es la convinación de hemosexuales y sabios y heterosexuales los que llevarán a la destrucción a la humanidad. Pues los primeros promueben la cultura y la tecnología que posibilita la fabricación de armas de destrucción masiva y los segundos la aplican en las guerras sin miramientos, con dos cojones como suele decirse. Sino hubiera sabios ni homosexuales, los hombres macho-macho todavía seguirian matandose a porrazos, un mal menor que no lleva a la destrucción de la especie.

2 comentarios:

  1. Es que durante millones de años de evolución, los homínidos machos tuvieron que luchar contra los elementos, las fieras y entre sí mismo para acceso a las hembras. La agresividad y la violencia eran imprescindibles en un mundo muy hostil.

    Llevamos unos años de sociedad industrial y tecnológica donde esos genes que permitieron la supervivencia de la especie, ya no son tan necesarios, a veces son un inconveniente. Pero el reloj biológico es lento. Han cambiado las circunstancias externas en los años o siglos recientes, pero los genes necesitan miles de años de cambio.

    Gandhi pacifista, pero cualquiera se agachaba a recoger una moneda delante de él, je, je. Atacaba con el sable.

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  2. No creo que exista el "macho-macho"
    Los "machos-machos" de la antigua Grecia se lo hacían con efebos y la efebofilia me parece que está más próxima a la homosexualidad que a la heteroxesualidad. O mejor será pensar que homosexualidad y heteroxesualidad sólo son etiquetas que hemos creado y que los hombres y las mujeres eligen pareja conforme a la enculturación que han tenido, el ambiente en el que se mueven, las circunstancias - penosas o agradables - por las que han pasado en la infancia y primera juventud. etc. Otra cosa son los que nacen afeminados y los transexuales, estos últimos por un error de la naturaleza. Pero incluso entre los afeminados hay personas que gustan del sexo contrario. Me remito, pues, al principio del comentario, somos tanto homosexuales como heterosexuales y lo que elegimos está condicionado por diversos factores, lo mismo del presente que históricos y religiosos
    Que determinadas personas ilustres adopten una tendencia sexual u otra creo que es irrelevante. Bueno, no del todo, si de pronto Rouco Varela se declarase gay, el bombazo informativo iba a ser tan fuerte que se iba a dejar de hablar de Zapatero, Guardiola y Gadafi en los próximos días.
    ¡Buen domingo!

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