jueves, 24 de noviembre de 2011

Recortar, la palabra de moda

El gobierno de Cataluña, arropado por su éxito electoral, ha cojido las tijeras con energía en una campaña de poda sistemática. Con una serie de recortes, algunos justificados, como el de los funcionarios. Es sabido que un funcionario de la Generalitat combra mucho mas que uno nacional. Un mosso de escuadra llega a cobrar casi el triple que un guardia civil. Y no digamos los políticos y altos cargos. Artur Mas dobla el salario del presidente de gobierno.
Otras medida son abiertamente aberrantes, como el impuesto a los carburantes que repercutira en la actividad económica.
Y que decir del pago por recetas, un copago encubierto con la intención de disuadir a la gente de acudir al médico. Una medida completamente ineficaz, que encarecerá todavía mas, la absurda burocracia sanitaria.
Todos estos recortes son solo exclusivamente para mantener la casta política catalana. Los verdaderos recortes han de venir del nuevo gobierno de Mariano Rajoy y se sumaran a los catalanes. Y es de suponer que todavía serán mas onerosos. La primera función de un político es mantenerse a si mismo, ya sea español o sirio. Y el que mantiene a esos vagos es el pueblo...desde la noche de los tiempos.
Esa es la verdadera causa del desdoblamiento de administraciones, Europea, Nacional, Autonomica, Diputaciones, Locales...etc.
El buen juicio aconsejaría eliminar intermediarios para abaratar el cacho de carne política, pero eso va en contra del instinto de supervivencia del que tiene que aplicar la medida. Por lo que llevarán el sistema hasta el limite, y mas allá. Personalmente creo que se enfrentarían a una revuelta tipo Siria o Egipto, antes que soltar el poder soberano, que desde luego no esté en el pueblo.
Pero eso no es todo, supongamos que en un ataque de locura, Rajoy decide, que ya está bien de chupopteros, que solo va repartir con cuatro amiguitos mas cercanos. Y decide suprimir autonomías (sobrán todas, aunque la vasca y la catalana son intocables), diputaciones y ayuntamientos varios e inútiles (Como el de El Prat de Llobregat, mero barrio de Barcelona). El problema no se acabaría aquí, no habrái deficit, pero seguiría habiendo paro, incluso mas, pues un montón de inutiles políticos se sumarían a las listas del INEM. Porque el problema de España es económico.

2 comentarios:

  1. Artículo que encuentro bastante acertado salvo en el final. El problema de España es político, por todo lo que expones antes: hay una burbuja política donde lo importante para los partidos es colocar a cuantos más de los suyos, mejor.

    La Autonomías han sido un fracaso total que nos han llevado a la ruina por ser inviables economicamente. No puede haber 18 centros de gasto y dispendio. Y han arruinado a las Cajas. Algo gordo.

    La economía y sabiduría ancestral apunta a que hay que ahorrar para mejorar. Pero eso que llaman recortes no es más que insolvencia por malversación que impide afrontar los pagos. Pero no suprimen televisiones autonómicas, o gastos de inmersión lingüística, o embajadas regionales o empresas públicas ficticias, sino que van a lo que les afecte en su ideología y sus intereses de partido.

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  2. http://apocalipticus.over-blog.es/m/article-71189297.html

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