Pero peor que estos 300, son los 30.000 de sus compañeros que no hacen nada para echarlos, al contrario son comprendedores necesarios. Que no es una figura delictiva pero que debería de serlo, como complices que son.
La corrupción política en España es su principal problema, siendo que todos los demás se derivan de esta. Y no solo la corrupción de los que se lo llevan crudo. Sino también la corrupción moral y ética que hace que personas sin ninguna aptitud para el servicio público, se dedique a esto pervirtiendo y ensuciando la política en general, mas allá de las ideologías de cada cual.
Todo ello causado por la partitocracia y las listas cerradas que permiten a cualquier paniaguado colocarse a costa del erario público.
Los partidos políticos parece que hubieran hecho una selección al revés: cuanto más incompetentes y más trincones, mejor.
ResponderEliminarY es evidente que no han hecho nada para combatir la corrupción interna política. La mayoría de las veces incluso cierran filas y callan para proteger al trincón.
Sólo hacen que lo rechazan cuando el asunto es ya escándalo.
Y hay que ver todo lo que se ha publicado en el caso concreto de muchos políticos catalanes. Por la décima parte ya hubieran sido descalabrados en cualquier país civilizado europeo.
Nunca tantos trincaron tanto como en la democracia española.