EL MUNDO EN LA ENCRUCIJADA

No perdamos la perspectiva, aunque Kim Jung-un nos parece un tipo estravagante y peligroso, no hay que olvidar que tiene razón. Los malos son los de Corea del Sur.
Los utramodernos y muy democraticos sudcoreanos son los descendientes directos de los colaboracionistas de la ocupación japonesa, enfrentados al movimiento de resistencia de los patriotas del norte. La ideología de ambos ha sido impuesta por sus socios mayoritarios. Comunistas chinos y "democratas americanos" Democratas que no dudaron de apoyar al dictador surcoreano padre de la actual presidenta.
Corea del norte es un pais pobre y embrutecido por decadas de guerra, pero el sur no es menos simpatico. Impera un neolibarlismo brutal, cuya única virtud es que ha fortalecido los lazos familiares, si eso es un virtud o una dictadura domestica. Pero en un país donde no hay sanidad pública ni sistema de pensiones, ni por descontado subsidio de desempleo. Y si despido libre, o tienes una familia que te apoya o acabas suicidandote. Suicidios que sobre todo son muy numerosos entre los estudiantes que fracasan en los estudios, pues la presión a los estudiantes es brutal, igual que a los trabajadores.
Esta explotación sistematica de los trabajadores, mas el apoyo interesado de los Estados Unidos es el que ha permitido que Corea del Sur sea una potencia economica, aun a costa de los intereses economicos de Estados Unidos y Europa. Corea ha hundido las empresas electronicas europeas, la de los astilleros y camino de acabar con la industria automovilistica. Todo en una economia cuyo unico objetivo es el anticomunismo belicista.
Ante esta guerra economica que sufre Corea del Norte, que menos que rebelarse, incluso a pesar de que puede costarles la misma existencia. Pero el momento extrategico es único, la economía financiera capitalista tiene hoy en día los pies de barro, una guerra, con lo que supone de emitir mas deuda, y mas dinero falso, podría ser la puntilla que acabase con el capitalismo mundial.
Lo malo de esto es que el Pentagono también lo sabe, y podrái estar tentado de lanzar una guerra de destrucción masiva que acabe la guerra de forma expeditiva y en pocos días a costa de la muerte de millones de civiles norcoreanos. No se necesitan armas atómicas para tal fin, bastan las modernas bombar termobaricas, que no dejan radiactividad y matán incluso mas que las nucleares.
La pregunta del millón es si China lo consentirá, y la respuesta es que si, a cambio de concesiones economicas y politicas en la peninsula sudcoreana. El peligro comunista de China es nulo, y su valor como aliado economico superior.