El viejo de Roma

Todo está preparado para que el próximo día 7 aterrice en España Don Benedicto XVI. Cual estrella del rock recorrerá España en loor de multitudes. Como no podía ser menos también Barcelona.
El líder religioso tiene muchos seguidores y mucho poder. Nada que objetar, hemos vivido muchos años bajo la férula de esa religión, en nuestro caso y por motivos históricos indisolublemente asociada a la dictadura.
La religión católica ha cambiado mucho desde el concilio Vaticano II, la teología de la liberación y demás movimientos de renovación eclesial. Pero no cabe duda que guarda tics autoritarios desde que era la máxima coartada del poder y opresión del pueblo. Sin duda pago por ello, en la Revolución Francesa y Mejicana. Y también en España durante la república. Pero no es suficiente.
Hoy en día con el Islam a las puertas, el cristianismo parécenos como un mal menor. Pero no nos dejemos engañar, la iglesia sigue del lado de las oligarquías, sus misioneros y sus Cáritas están lejos de ser una alternativa a una justicia social y universal. Por lo contrario continúan siendo la coartada y justificación de los poderosos.
Mucho ha de cambiar el catolicismo para que el pueblo no siga dándole la espalda. Empezando por esa estética ridícula de sayones y ritos arcaicos sin sentido. Por no hablar de su estructura antidemocrática y misógina. Sin hablar de su estúpida actitud ante los asuntos sexuales que contravienen todas las leyes naturales. Es hora que la iglesia católica se vuelva protestante.
Pueden hacerme caso o hundirse entre sus lujos y obras de arte. Ahora el pueblo tiene la opción islámica una religión de un gran potencial revolucionario. La competencia va a ser muy dura. Lo siento por las mujeres ricas, las únicas que se benefician de la supuesta liberación feminista.
Inshalla y amen.