Sin Limites. Crítica cinematográfica

TÍTULO ORIGINAL:Limitless
AÑO: 2011
DIRECTOR:Neil Burger
REPARTO: Bradley Cooper,Elizabeth Banks,Robert de Niro,Anna Friel


SINOPSIS:Sin Límites cuenta como el aspirante a escritor Eddie Morra (Cooper) sufre de bloqueo de escritor crónico, pero su vida da un giro en cuanto un viejo amigo le da a conocer el NZT, un medicamento revolucionario que le permite aprovechar su potencial por completo. Con cada impulso nervioso, Eddie puede recordar absolutamente todo lo que ha leído, visto o escuchado, aprender cualquier idioma en un día, entender ecuaciones complejas y encantar a todo aquel con el que se cruce – siempre que continúe tomando la droga experimental.




CRÍTICA
Curiosa película, no se puede decir que no sea un guión original con un tema igualmente novedoso. Adolece de cierta coherencia, pero esto ya sería pedir demasiado. El guionista seguramente no es adicto a la portentosa sustancia de la que habla la película. O quizás se ha pasado de listo y es culpa mia que no he entendido bien la película.
Una pastillita que te hace mas listo. Algo de eso he oido hablar, de ciertos experimentos con ratones...y hace bastante tiempo. ¿Quien no nos dice que esa sustancia no exista ya y como en la película la este acaparando ciertos grupos de poder? Tal como va el mundo es bastante improbable.
Con todo de una cosa deja claro la película, somos idiotas.
El mas inteligente de los humanos no se da cuenta ni del 1% de lo que le rodea. Si, hay gente que logra una gran especialización en ciertas areas, hay otros que tienen un extraordinario talento para esto o aquello. Pero en definitiva desaprovechamos nuestro cerebro. ¿Por que?
Supongo que hay unos limites físicos y biológicos, pero debería de haber algún sistema para desarrollar la inteligencia, lejos de las sustancias químicas (aunque todo llegará).
Antes solo había un tipo de inteligencia, la que medían los tests, en una mezcla de memoria, cultura y habilidad para resolver problemas. Pero hoy en día hay varios tipos de inteligencia, la emocional, la social.
Aunque no creo que debamos de preocuparnos por el asunto, cada uno llega hasta donde llega, ya es mucho si reconocemos que estamos limitados y condenados a hacer estupideces.