La aberrante situación en Somalia lleva años pudriendose, practicamente desde su artificial creación por las potencias coloniales. Los intentos internacionales para poner un poco de orden en el territorio han chocado con la obstinada belicosidad de sus habitantes. Han fracasado potencias como Estados Unidos y paises limitrofes como Etiopía. Actualmente el gobierno central, o algo parecido se mantiene con el apoyo de tropas ugandesas.
A raíz de varios cooperantes internacionales, entre ellos dos españolas, Kenia ha lanzado una gran ofensiva con la intención de acabar con las guerrillas musulmanas afectas a Al Qaeda. Parece que cuenta con la aquiescencia del gobierno legitimo de Mogadiscio, o sea de los ugandeses. Pero sorprende que ningún otro país se haya sumado a la iniciativa, para pacificar definitivamente ese estado fallido.
Ni Estados Unidos, cuya guerra con Al Qaeda es abierta en otros países. Ni Etiopia. Ni siquiera España que tiene a sus dos secuestradas en manos de los bandidos se la Shebab.
Una de las secuestradas francesa, murio hace poco. Pero Francia no ha reaccionado, a pesar de tener un importante destacamento (junto a otros países) entrenando soldados en Yubuti, supuestamente para intervenir en Somalia. Sin hablar de todo el despliegue de la operación Atalanta contra la piratería somalí.
Es mi opinión que la guerra no acaba mas que empezar, y si solo han intervenido los keniatas, debe ser por una cuestión táctica de cara a la opinión pública occidental, mosqueada todavía por las guerras interminables en Afganistan e Iraq. Aparte de no enojar a los musulmanes, que cierran los ojos ante los desmanes islamistas y no cejan para criticar toda acción en pro de la paz y el orden internacional.
Así es que de suponer que pronto se úniran otros países a la avanzadilla keniata.
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