Todos -o casi todos- pendientes del partido llamado 'Clásico' por enfrentar a los dos clubs más famosos de España.
Andaban los ánimos bastante crispados por haber metido las pezuñas la
ANC, esa organización de mafiosos catalanes que con nuestro dinero se
dedican a manipular a los infantiloides que sueñan con condes y reinos
inexistentes, seguros de hacerse ricos y poderosos con sus fantasías de
parvulos.
Pues no. En el minuto 17,14 segundos, todos los anormales gritaron lo de
independencia, pero esto ya estaba previsto desde hace días. A los
pobres, si no se les dan directrices concretas, se pierden como un
pececito dorado de pecera soltado en el mar.
He seguido el partido en un par de medios distintos, por eso de no
dejarme engañar por el comentarista de turno y, obviando los comentarios
interesados, allí hubo fútbol y ninguna tontería separatista porque las
que hubieron ya las sabíamos y ni fu ni fa. Puede que el lunes se sepa
de tal o cual altercado, a saber... Porque esto no entra dentro de las
atribuciones de un comentarista deportivo, pero si han mencionado las
estrelladas "cubanas" y los gritos de independencia en el minuto 17:14,
raro sería que no señalasen algún altercado de haberse producido ante
sus ojos.
Paso a hacer mi crónica del partido como tengo por costumbre con el
'Clásico'; muy somera, esto sí, que más que nada lo hago por mi hijo,
ferviente culé que la espera.
Estrena el marcador en el minuto 23 el nenazas llorica de CR7 y más chulo que un ocho, como tiene por costumbre, se pavonea sólo.
Apenas ocho minutos después, Leo Messi, el gran guerrero argentino logra el empate.
Obviemos tarjetas amarillas y lesiones sin importancia (espero), para reírnos un rato con la chilena del llorica con la que se descuajeringó el hombro izquierdo. Bueno, ahora sí tendrá motivos para sentirse triste y llorar, ¿no?
En la segunda parte y en el minuto 61, Messi marca de nuevo.
Sin dar respiro, el merengue marca su segundo gol en el minuto 66.
Resultado: 2-2 y ningun altercado en el campo, entre jugadores, señal de que los necios independentistas se han caido de morros con sus provocaciones de pa sucat amb oli. España y también Cataluña los ignora a pesar de las estrelladas "cubanas" ondeadas por tontos del haba.
No hay más que ver la imagen para darse cuenta de que ni saben montar una frase para que pueda ser leída, pobres inanes.
Por cierto, ¿es una estrellada culé lo que veo en la foto? ¡Juas juas juas! Me troncho y me mondo. Son tan ridículos que dan pena y no se enteran.
Estrena el marcador en el minuto 23 el nenazas llorica de CR7 y más chulo que un ocho, como tiene por costumbre, se pavonea sólo.
Apenas ocho minutos después, Leo Messi, el gran guerrero argentino logra el empate.
Obviemos tarjetas amarillas y lesiones sin importancia (espero), para reírnos un rato con la chilena del llorica con la que se descuajeringó el hombro izquierdo. Bueno, ahora sí tendrá motivos para sentirse triste y llorar, ¿no?
En la segunda parte y en el minuto 61, Messi marca de nuevo.
Sin dar respiro, el merengue marca su segundo gol en el minuto 66.
Resultado: 2-2 y ningun altercado en el campo, entre jugadores, señal de que los necios independentistas se han caido de morros con sus provocaciones de pa sucat amb oli. España y también Cataluña los ignora a pesar de las estrelladas "cubanas" ondeadas por tontos del haba.
No hay más que ver la imagen para darse cuenta de que ni saben montar una frase para que pueda ser leída, pobres inanes.
Por cierto, ¿es una estrellada culé lo que veo en la foto? ¡Juas juas juas! Me troncho y me mondo. Son tan ridículos que dan pena y no se enteran.
Lamento habertelo pisado, pero no lo había visto. Soberbio artículo....en el Facebook hay uno que no le ha gustado, jejeje
ResponderEliminarNo me motiva el futbol. Sin embargo, por lo que veo, en este partido en concreto, hemos ganado todos porque parece que las cosas no han ido a mayores.
ResponderEliminarSupongo que el empate también habrá influido para que la gente no se exaltara más de la cuenta?
No te preocupes, Periódico.
ResponderEliminarGracias, ahora iré a ver quien es, aunque ya me lo imagino, je je je...
Efectivamente, Rosa, no ha habido ninguna incidencia digna de mención, la mitad del público no se ha tirado contra la otra.
ResponderEliminarNo creo que tenga nada que ver el resultado porque lo que se temía era de cariz político, pero los no independistas no entraron al trapo de la provocación. Y nunca mejor dicho lo de trapo ;D